Este protocolo está especialmente diseñado para tratar el acné y las manchas producidas por su aparición, ya que aporta al rostro la luminosidad perdida.
Es un tratamiento de pureza total indicado para pieles que presentan brillos, poros dilatados, comedones e incluso granitos. Oxigena inmediatamente la piel asfixiada como un gran soplo de aire, aportándole un aspecto aterciopelado y de luminosidad instantánea.
Para realizar este tratamiento ultilizamos una gama de cosméticos que aportan soluciones para cada problema y alteración dermatológica.
Al aplicarlo con técnicas manuales exclusivas, lograremos una penetración y absorción óptima de los principios activos especialmente formulados para equilibrar los niveles de hidratación y grasa de la piel.
No solo eso; el protocolo se convierte, además, en una experiencia agradable y relajante.
Pata cutis con tendencia al acné, las imperfecciones o la inflamación, ya que trabaja las pieles asfixiadas y la luminosidad del rostro.
Para limpiar la piel, purificar los poros y aportar luminosidad instantánea, este tratamiento requiere de 3 a 6 sesiones.
Una piel hidratada en profundidad, sin brillos, con el poro sin bacterias que causan el acné.
Su doble acción te hará lucir una piel más lisa, sin acné ni rastros de imperfecciones. Además, consigue difuminar líneas de expresión y marcas leves. Difumina y previene la aparición de manchas oscuras y tiene un efecto luminosidad inmediato.